"El juego es el disfraz del aprendizaje"
(Francisco Mora Teruel)
Las teoría de las piezas sueltas fue desarrollada hace mucho tiempo pero la implementación en mi aula no hace mucho que llegó. En mi aula los niños/as lo autodenominaron "el rincón de los cacharretes" debido a los "cacharros" que según ellos había: tapas metálicas, conchas, tapones de plástico,...
Este ambiente desarrolla la creatividad y la libertad de creación, dejándo al niño/a crear según el momento en el que se encuentre e incluso su estado de ánimo.
Una de las mejores decisiones que he tomado dentro del aula ha sido implementar este espacio. En el "Punto de lectura" os dejo un libro muy interesante sobre esta teoría.
El arroz o cualquier material discontínuo tal como la arena, ofrece muchas posibilidades lúdicas y educativas si se utiliza adecuadamente. Simplemente depositar arroz sobre un contenedor adecuado y disponer de distintos utensilios para poder hacer trasvases y lo más difícil está hecho.
Hay que armarse de paciencia con el arroz que sale fuera del recipiente pero no hay nada no se pueda solucionar con un buen cepillo y un recogedor.
Una derivada más de la teoría de las piezas sueltas, con cierta conexión con la pedagogía Reggio Emilia y que conjuga juego simbólico con material no estructurado. Un sinfín de posibilidades creativas e imaginativas en las que como el propio nombre dice, se crean minimundos espectaculares que los propios niños/as dan vida.
No quiero "abrir tan pronto el cajón" de la lecto-escritura en la Educación Infantil, pero os dejo un "cacharro" DIY con un cedazo de harina y un pequeño tubo led. Sí, un cedazo de cocina con algunos retoques.
Sensaciones y trazos van de la mano.
Pintar, crear, imaginar sobre un metacrilato transparente es mágico y muy especial para los niños/as. Material muy básico pero con una gran potencialidad creativa. Si le añades una pequeña lámpara se crea una "máquina de calcar" con muchas posibilidades.
Lugar para el relax y la tranquilidad, tan necesaria algunas veces. En dicho espacio hay material sensorial, objetos para la observación reposada y un lugar... en el que simplemente estar si te lo pide el cuerpo. Lugar en el que atender a la Inteligencia Intrapersonal.
Un buen trabajo pre-lector/escritor pasa por la “manipulación” de las letras, entre otras muchas cosas. En estos espacios-ambientes se manipulan, se transforman y se trabajan de una manera simple y significativa. Aquí las letras se “tienden”, se mecanografían y se utilizan para elaborar mensajes necesarios para el propio niño/a.
En este espacio se le ofrece al niño/a la posibilidad de expresarse a través de distintos útiles de pintura y en distintos soportes. La acuarela ofrece muchas posibilidades y puede ser el paso previo a la utilización libre de otro tipo de pinturas, tales como la témpera.